¿Es Creíble David Whitmer?

Barranquilla, 2 de marzo de 2015

Como estás mi buen amigo; hoy quisiera hablarte de un tema muy importante, la idea surgió por un vídeo de la iglesia que un amigo me envió disque para sacarme de las “tinieblas de la apostasía”. El vídeo es producido por, y no me sorprende, la BYU, y trata de David Whitmer y su defensa del testimonio que dio sobre el libro de Mormón, algo curioso, pues casualmente hacía poco acababa de leer el folleto de Whitmer “Carta a todos los creyentes en Cristo”, donde él, a pesar de que es cierto que no negó la historia de la “visión” del ángel que le mostró las planchas y todo eso, admite que tuvo serios inconvenientes, que podríamos decir graves, en temas doctrinales, personales, económicos y vaya usted a saber de que otro tipo, con el “profeta” José Smith. Al ver el vídeo y recordar lo que había leído en dicho folleto, no pude dejar de pensar en la forma en que la iglesia mormona disfraza la verdad, lo que se pone de manifiesto cuando, en el vídeo, a Whitmer se le dice “ustedes los mormones”, para que pareciera como si él era miembro de la iglesia, cuando se sabe, y esto sólo si investigas bien, que para esa fecha él tenia muchos años de haber sido excomulgado y hacía parte de la Iglesia de Cristo, y que además estaba en plena contravía con Brigham Young, sucesor de Smith y rey del imperio mormón polígamo de Utah.

Nuestro amigo Whitmer tuvo su “visión celestial” del ángel con las planchas, y sí, se mantuvo firme en eso hasta su muerte, pero también es cierto que dijo que así como una voz del cielo le dijo que el libro de Mormón era verdadero, de igual forma una voz del cielo le dijo que se alejara de la iglesia por que esta, junto con sus líderes y doctrina, habían caído en error, y si vamos a creer en su primera palabra sobre el ángel ciegamente, por qué no hacerlo en la segunda también, si de igual manera se mantuvo firme en ella hasta el ultimo día de su vida. David debería ser creíble para todas sus palabras y no únicamente para aquellas que le convienen a la iglesia mormona. Y me pregunto, ¿por qué no hacen un vídeo donde muestren el verdadero parecer de Whitmer sobre la iglesia y su doctrina tal como lo manifiesta en su folleto y no únicamente lo que les conviene a la iglesia? La respuesta es obvia, la iglesia no es transparente.

Mi querido amigo, te digo todo esto sobre Whitmer porque no quisiera que fundamentaras tu fe en la iglesia mormona sólo por algo tan inestable como la palabra de un hombre; al fin y al cabo, como lo dice en uno de los libros canónicos de la iglesia, “maldito el hombre que confía en otro hombre… ” (Jeremías 17:5). Por lo tanto, no es conveniente dejarse influenciar por una serie de personajes que, si estudias bien sus vidas y sus pasos por la iglesia, te darás cuenta que sus relaciones con la misma no fueron constantes y que en realidad no estuvieron de acuerdo en todo con el “profeta” José, tanto así que Oliver Cowdery, otro de los tres testigos del libro de Mormón, fue excomulgado por denunciar la relación adúltera de Smith con una adolescente que trabajaba en su casa (Fanny Alger), llamando dicha relación “asquerosa”. Pero ese es tema para otra carta.

Finalmente amigo mío, no te engañes tú mismo como aquel que me envió el vídeo de Whitmer, hecho por la BYU, creyendo ciegamente todo lo que dicen tales vídeos, manuales, instituto de religión, seminarios, escuela dominical, lds.org, etc… por que al igual que este vídeo, siempre son blanqueados para beneficiar a la iglesia, pero una y otra vez se han caído sus encubrimientos gracias a personas valientes, mal llamadas y satanizadas como anti-mormones. Este rótulo es sólo para que los miembros se alejen por completo de la verdad. Podemos hacer investigación histórica y doctrinal seria de la iglesia y sus raíces sin escarcha ni cloro que quita lo sucio y hace brillar lo que está opaco. Sí, no te dejes llevar de la mano de los “profetas, videntes y reveladores” por su sendero del engaño, puesto que de reveladores sólo tienen el título, y en realidad es más lo que esconden que lo que revelan. Más bien suelta sus manos y súbete a los hombros de la verdad y de los hechos históricos, porque aunque la historia se pretenda esconder, ya es tarde para ser cambiada.

Recuerda que, según su propio libro:

“La verdad es el conocimiento de las cosas COMO SON, COMO ERAN Y COMO HAN DE SER. DyC 93:24”

Atentamente,