El Lucifer Mormón Tiene el Sacerdocio

Barranquilla, 27 de mayo de 2015

Como estás, mi querido amigo. Hace poco alguien me preguntó sobre algo de lo que la iglesia no habla mucho y que solamente lo han escuchado unos cuantos, los más atentos de los miembros que tienen el “privilegio” de entrar al templo a realizar su investidura. Se trata del SACERDOCIO DE LUCIFER, algo de lo que te mencioné en una de mis cartas anteriores, y que con sólo imaginarlo hace temblar a cualquier creyente, pues en el vídeo que se reproduce durante la sesión de investiduras mormona, se observa una escena un tanto peculiar que a más de uno ha dejado pensativo. En dicha escena, Adán al ver la vestimenta de Lucifer le pregunta: ¿Qué es ese delantal que llevas puesto?, a lo que Lucifer responde: Es el símbolo de MI PODER Y MIS SACERDOCIOS. Luego de esto, es Lucifer quien le entrega a Adán y Eva los delantales hechos de hojas de higuera para cubrir su desnudez, siendo así Lucifer quien entrega al primer patriarca de la raza humana el emblema del PODER Y AUTORIDAD de Elohim, que cosa más extraña ¿no te parece? Así vas entendiendo el por qué de lo secreto de las ceremonias del templo.

Para empezar a mostrarte de forma clara tal doctrina que puede ser tildada de aberración para cualquier cristiano o creyente, debemos ahondar en las escrituras inventadas por Smith, además de las definiciones de sus “sucesores apostólicos”. Primero recordemos en que consiste el sacerdocio, del cual sabemos que es el poder y autoridad de Elohim y que dicho poder radica en la obediencia que le profesan las inteligencias organizadas, tal como nos dice DyC 63:59: “He aquí, YO DE ARRIBA SOY, Y MI PODER YACE ABAJO. Estoy sobre todas las cosas, y en todo, y en medio de todo, y escudriño todas las cosas…”, en esta “escritura”, Smith dice que el poder de Dios, o sea su sacerdocio, se encuentra acá entre sus creaciones pues las inteligencias, al obedecerle, realizan cualquier cosa que Elohim les pida, de ese modo, él está en medio de todo y lo escudriña todo.

Ahora observa la definición que McConkie, en su remembrado libro “Doctrina Mormona”, hace sobre el sacerdocio y como lo separa de acuerdo a los tiempos:

"SACERDOCIO.
En lo que pertenece a la eternidad, el sacerdocio es el poder y autoridad eternos de Dios por medio del cual existen todas las cosas, son creadas, gobernadas y controladas; a través del cual el universo y mundos infinitos han llegado a existir; por el cual el gran plan de creación, redención y exaltación opera en la inmensidad. Es el poder de Dios. (Discourses; pág. 130; Gospel Kingdom, pág.129.) – En lo que respecta a la existencia del hombre sobre esta tierra, el sacerdocio es el poder y autoridad de Dios delegados al hombre sobre la tierra para actuar en todas las cosas para la salvación de los hombres. Es el poder por medio del cual se predica el evangelio; se realizan las ordenanzas de salvación atando en la tierra y en los cielos; por medio del cual los hombres son sellados a vida eterna asegurando así, la plenitud del reino del Padre en el más allá y por su intermedio y a su debido tiempo el Señor gobernará las naciones de la tierra y a todo lo que pertenece a ella. (Doctrina del Evangelio, pág. 131-194.)…”Quedó instituido desde antes de la fundación de esta tierra, antes que `las estrellas todas del alba alabaran, y se regocijaran todos los hijos de Dios’, y es el sacerdocio mayor y más santo, y es según el orden del Hijo de Dios; y todos los demás sacerdocios son únicamente partes, ramificaciones, poderes y bendiciones que le pertenecen y que por él son poseídos, gobernados y dirigidos.” (Enseñanzas, pág. 198.)"

Ahora veamos las definiciones de Lucifer del mismo libro, lo que nos puede dar luces en cuanto al concepto mormón de dicho personaje:

"DIABLO.
El diablo (que literalmente significa embaucador) es un hijo espiritual de Dios que NACIÓ EN LA MAÑANA DE LA PREEXISTENCIA (HIJO DE LA MAÑANA). (D. Y C. 76:25-26.)…Es obvio que adquirió gran habilidad administrativa y una personalidad lo suficientemente atractiva como para influenciar para el mal a una multitud de hijos del Padre. Su posición era de GRAN PODER Y AUTORIDAD. Era “un ángel de Dios”. (2 Ne. 2:17; D. Y C. 76:25.) Cuando se presentó el plan de salvación -según el cual los hijos espirituales del Padre tendrían la oportunidad de obtener cuerpos tangibles y si se mantenían fieles a todas las cosas, un progreso hasta tener un estado igual al del Padre – y cuando se explicó que habría necesidad de un Redentor, Satanás se ofreció venir a este mundo como Hijo de Dios y ser el Redentor. “Heme aquí, envíame ‘a mi;’ dijo.” Seré tu hijo”, pero entonces, como siempre, estaba en oposición al plan del Padre y trató por lo tanto, cambiar y enmendar los términos de la salvación; trató de negar a los hombres el derecho al libre albedrío y destronar a Dios. “Rescataré a todo el género humano, de modo que no se perderá ni una sola alma y de seguro lo haré; dame pues tu honra,” continuó. (Moisés 4:1-4.) Con el rechazo de su plan y la elección del Hijo Amado para ser el Redentor, Satanás se rebeló abiertamente contra el Señor. “Pues, por motivo de que Satanás se rebeló contra mi y pretendió destruir el albedrío del hombre que yo, Dios el Señor, le había dado y también, que le diera por mi propio poder, hice que fuese echado abajo por el poder de mi Unigénito y se convirtió en Satanás, si, el diablo, el padre de todas las mentiras, para engañar y cegar a los hombres y llevarlos cautivos según la voluntad de él, si, a cuantos no quieran escuchar mi voz.” (Moisés 4:3-4.) “La tercera parte de las huestes del cielo” se unieron a su rebelión, “Y así llegaron a ser el diablo y sus ángeles.” (D. Y C. 29:36-38; Apoc. 12:4-9; Abra. 3:27-28.)"

"LUCIFER.
Este nombre de Satanás significa literalmente ILUMINADO o el que brilla (brillante) De esta manera se transmite el status de PROMINENCIA Y AUTORIDAD que había logrado en la preexistencia, antes de su rebelión y caída. (D. & C. 76:25-27; Isa. 14:12-20; Lucas 10:18, 2 Ne. 2:17-19.)"

"HIJO DE LA MAÑANA.
Este nombre o título de Satanás indica que fue uno de los primeros hijos espirituales que nacieron del Padre. Usado siempre con el nombre Lucifer, hijo de la mañana aparentemente significa también hijo de luz, hijo distinguido, que quiere decir que Satanás estaba en una posición de PODER Y AUTORIDAD en la preexistencia. (D. Y C. 76:25-27, Isa.14:12-20.)"

A dichas definiciones le podemos dar un sustento en cuanto a la autoridad recibida por Lucifer mientras aún se hallaba entre los escogidos para ser reyes y gobernantes en esta cita a José Smith, lo que da peso a la doctrina:"

"CONCILIO EN LOS CIELOS.
José Smith menciona “la cabeza de los Dioses” llamando a “un concilio de los Dioses” para planear la creación y población de la tierra (Enseñanzas 433-434.) También habla de “un gran concilio en los cielos” en el cual, los que habían sido destinados para “ministrar a los habitantes de la tierra” fueron “ORDENADOS” a sus respectivos llamamientos. (Enseñanzas, pág. 453.) Cuando los santos hablan comúnmente del concilio de los cielos, tal vez tienen en mente una sesión solemne (en la cual aparentemente estaba presente toda la hueste preexistente) en la que el Padre hizo un anuncio formal de su plan de redención y salvación. Entonces explicó que sus hijos espirituales deberían descender a la tierra, obtener cuerpos de carne y sangre, ser probados en todas las cosas y luego, a través de la obediencia, tener la oportunidad de volver otra vez a la Presencia Eterna. Luego se explicó que uno de los hijos del Padre sería elegido para ser el Redentor y llevar a cabo la expiación infinita y eterna. Y fue entonces, que el Padre extendió el llamado que en resumen decía: ¿A quién enviaré para ser mi Hijo en la mortalidad? ¿Quién bajará, nacerá teniendo vida en sí mismo, para obrar el gran sacrificio expiatorio mediante el cual vendrá la inmortalidad a todos los hombres y será asegurada la vida eterna al obediente? Dos espíritus PODEROSOS contestaron el llamado y se ofrecieron para el servicio. Cristo dijo: He aquí, envíame; seré tu Hijo; seguiré el plan. “Padre, hágase tu voluntad, y sea tuya la gloria para siempre.” Pero Lucifer buscó enmendar el plan del Padre y cambiar los términos para la salvación, proferidos por el Padre. “Heme aquí, envíame a mí” dijo, “Seré tu hijo y rescataré a todo el género humano, de modo que no se perderá ni una sola alma, y de seguro lo haré; dame, pues tu honra.” (Moisés 4:1-4.) Cuando el Padre dijo, “Enviaré al primero,” Lucifer se enojó, no guardó su primer estado, “se rebeló y él junto con una tercera parte de las huestes (inteligencias) del cielo fueron arrojados a la tierra donde llegaron a ser el diablo y sus ángeles”. (Abra. 3:25-28; D.& C. 29:36-40.)"

Y si a todas éstas citas le añadimos una que otra “escritura”, como las que colocaré a continuación, tendremos una idea muy clara de la manera en que Smith y sus colegas veían a Lucifer, quien para ellos tenía o tiene aún gran poder y autoridad.

"Alma 13:3
3 Y ésta es la manera conforme a la cual fueron ordenados, habiendo sido llamados y preparados desde la fundación del mundo de acuerdo con la presciencia de Dios, por causa de su fe excepcional y buenas obras, habiéndoselas concedido primeramente escoger el bien o el mal; por lo que, habiendo escogido el bien y ejercido una fe sumamente grande, son llamados con un santo llamamiento, sí, con ese santo llamamiento que, con una redención preparatoria y de conformidad con ella, se dispuso para tales seres."

"Abra. 3:22-24
22 Y el Señor me había mostrado a mí, Abraham, las inteligencias que fueron organizadas antes que existiera el mundo; y entre todas éstas había muchas de las nobles y grandes;
23 y vio Dios que estas almas eran buenas, y estaba en medio de ellas, y dijo: A éstos haré mis gobernantes; pues estaba entre aquellos que eran espíritus, y vio que eran buenos; y me dijo: Abraham, tú eres uno de ellos; fuiste escogido antes de nacer."

"Doctrina y Convenios 29:36
Y aconteció que Adán, habiendo sido tentado por el diablo, pues, he aquí, éste existió antes que Adán, porque se rebeló contra mí, diciendo: Dame tu honra, la cual es mi poder; y también alejó de mí a la tercera parte de las huestes del cielo, a causa de su albedrío;"

Teniendo como base todas estas citas y/o escrituras mormonas, podemos vislumbrar un panorama claro con relación a la creencia del mormonismo sobre la importancia de Lucifer tanto en la “vida pre-mortal” como en las subsecuentes etapas de la existencia del alma humana tal como lo cree y enseña la iglesia mormona, por lo que podemos concluir lo siguiente:

El Sacerdocio mormón es el poder y autoridad que tiene Elohim, el cual radica en la obediencia de la infinidad de “inteligencias”, y de esa manera él puede así ser omnisciente y omnipotente. Dicho poder está con él desde antes de crear esta tierra, lo que se conoce como la “vida pre terrenal”, y en dicha etapa de vida creó inteligencias superiores conocidas como “nobles y grandes” entre las cuales se encontraba Lucifer, quien nació en “la mañana de la preexistencia”, incluso antes que Adán, y adquirió un status de prominencia que le dio el derecho de ser “ordenado” al Poder y Autoridad de Elohim, o sea al Sacerdocio.

Como es entendido, el poder de Elohim no radica en la ordenación, sino en la obediencia de las inteligencias organizadas, quienes son las que hacen el trabajo bajo las ordenes de éste, y como Lucifer intentó quitarle dicha honra a Elohim, o en otras palabras, quiso que las inteligencias le rindieran respeto y obediencia a él, fue desterrado y condenado a no obtener cuerpo. No obstante, dicho destierro no le quitó su ordenación, y además recibió el apoyo de la tercera parte de las inteligencias organizadas, obteniendo de ésta forma el poder de gobernarlas, y por consiguiente posee el mismo poder de Elohim pero en un porcentaje menor. Debido a esto, la ordenación que reciben los hombres de la iglesia no representa ni presupone poder alguno sino la autoridad para realizar “ordenanzas” dentro del ritualismo mormón, por lo que los hace, en cuanto a poder, inferiores a Lucifer, quien si cuenta con un poder real por contar con el respaldo de un tercio de las creaciones de Elohim.

Es a causa de doctrinas como ésta que el mormonismo separa sus enseñanzas en “la leche del evangelio”, que es el cúmulo de principios enseñados tradicionalmente por el cristianismo en general, lo que les permite parecer como cristianos reales, además de unas ordenanzas superficiales y engañadoras, y “la carne del evangelio”, en donde radica el verdadero sentir mormón, y donde se encierran las más extrañas prácticas y creencias de la secta.

Habiendo dilucidado la empantanada doctrina mormona, es prudente, a mi modo de ver, que desapegues tu alma y mente de una secta como esta que no es transparente en cuanto a sus creencias más importantes y que disfraza las mismas detrás de una nube de “cristianismo” solapado. Te incentivo en tu deseo de aprendizaje y que cultives ese amor al conocimiento que nos hace libres de pensamientos y acciones y nos dan salud mental al no someternos a los miedos y las culpas infundadas por mentes corruptas y con hambre de poder y riquezas que se esconden detrás de los púlpitos de sectas y religiones. Continúa en el esfuerzo que emprendiste y recuerda que

No necesitas de una doctrina intrincada para alcanzar la realización que trae la bondad en las acciones y la felicidad que trae el hacer feliz a los demás.


Atentamente.