¿Es la Misión un Mandamiento?

Barranquilla, 20 de febrero de 2015

A ti, mi amigo Mormón.

Quisiera contarte algo un tanto curioso que me pasó hace unos días, es posible que ya muchos lo sepan pero igual quiero compartirlo junto con mis impresiones sobre el tema.

Estaba buscando información acerca de los “profetas” mormones y descubrí algo interesante sobre Thomas Monson y el asunto de la misión regular. Siempre se me había dicho que el profeta no había ido a la misión por que había estado ocupado sirviendo a la patria en el ejercito, eso fue algo aceptable en ese momento para mi y creo que para todos o la mayoría de los hermanos que fuimos víctima de la sistemática forma de acoso para ir a regalar dos años de tu vida en pro de incautos para engordar las filas y chequeras de los profetas “videntes y reveladores”, fue entonces que encontré esto que quisiera compartir tal cual lo encontré:

Monson en la armada

“En 1945, a los 17 años de edad, se unió con la reserva de la armada de los Estados Unidos, en anticipación a acciones estadounidenses de la Guerra del Pacífico (1937-1945) durante el cierre de la II Guerra Mundial aunque no participó en acciones relevantes. Fue enviado hasta San Diego pero no tuvo servicio en el exterior, terminando su servicio al cabo de seis meses con el fin de la guerra y es dado de baja en forma honorable y sin distinciones.

En 1947, se enrola en la Universidad de Utah de donde se graduó cum laude en administración de empresas. Una vez recibido, Thomas S. Monson trabaja en organismos de la iglesia y en la universidad como catedrático. Luego colabora en Deseret News y trabaja como ejecutivo en una agencia noticiosa.

En su graduación

En esa época conoce a quien sería su esposa, Frances Beverly Johnson y con la cual contraería matrimonio en octubre de1948.”

Notaron algo?…

Si, el “profeta vidente y revelador” Thomas Monson NO fue a la misión pero NO por estar sirviendo a la patria, ya que solo sirvió seis meses sin salir de Estados Unidos, sino por, y sonará dura la palabra pero es la que siempre se me dijo a mi por parte de los líderes de la iglesia, COBARDÍA. Si, en muchas ocasiones, antes y después de cumplir mi edad misional, por años fui, y creo que muchos de mis amigos también, tildado de cobarde, ya fuera por frases directas o indirectas, dedicación de clases, mensajes de orientación familiar, etc, etc, etc, siempre se me dijo que no era más que eso y que debía arrepentirme. Recuerdo una clase que le estaba dando a los hombres jóvenes sobre la misión, les comenté una de las razones por las que no fui a la misión pero los invitaba a que ellos si fueran, le pedí un comentario al obispo, y el comentó que la iglesia tiene miles de hermanas sirviendo porque miles de poseedores del sacerdocio son “cobardes” y no cumplan con su deber. Su comentario fue insultante y sobre todo injusto pues el conocía muy bien mis condiciones y las razones y, me parece a mi, fue solo para acosar más a los muchachos que lo escuchaban para hacerlos sentir obligados a ir a la misión.

Si analizamos bien veremos que Monson pudo haber ido a la misión luego de su servicio al ejército de haberlo querido, ya que tenía entre 17 y 18 años de edad y podría fácilmente esperar para cumplir con su “deber” con su Dios, al fin y al cabo “dad a Cesar lo que es de Cesar y a Dios lo que es de Dios”, lógicamente y para no caer en el prejuicio de mi obispo, el pudo tener sus razones para no ir: dignidad, flojera, desgano, etc. . . . no se, sólo el lo sabe, por tal motivo todos esos comentarios venenosos que se nos hacían salpicaban, tal vez sin saberlo, al “gran profeta” de aquellos mismos que los escupían. ¿No es esto irónico amigo mío?

Mi amigo, esto no lo escribo para hablar mal de Monson ni mucho menos, aunque él y sus colaboradores pueden ser tildados de responsables por el acoso y la coerción psicológica y espiritual sistemática para obligarnos a traer mas “conversos”, o diría yo incautos, a la iglesia, por ser ellos quienes colocan cuotas o mejor “metas” de misioneros por año a los lideres locales. Mi propósito es que tú sepas que en realidad no necesitas perder dos años de tu vida y que no es tu “deber” malgastarte en un servicio gratuito, o mejor dicho, pagado por ti, que, contrario a ser para Dios, es para los dueños de la iglesia, esos mismos que no te estimularon con el ejemplo y luego “animan” a tus lideres locales para que te hagan sentir pecador. Déjame decirte, no eres pecador, no eres cobarde, y si eso fuera verdad, debes saber que la misión no es requisito para llegar a ser “profeta vidente y revelador”. O si no pregúntale a Monson.

Por último quisiera decirte que el servicio misional mormón no es algo muy distante de una agencia comercial que se encarga de vender un producto y utiliza las mayores tácticas y técnicas (modelo de compromiso le llamaban en mi época, para nombrar sólo una de estas) para lograr sus objetivos, “invitar a todos (a pagar) para venir a Cristo”. Fíjate bien en su mensaje disfrazado y veras que es algo así como:

Cristo es el camino y Yo (la iglesia Mormona) soy el peaje.


Atentamente,